viernes, marzo 31, 2006

Poesía 4

Soy esa sombra que queda sobre el mundo después de la tormenta.

Mis huellas son un halo de nostalgia que trasega entre las flores que ya fueron taladas. Por eso, cuando bebo de más, hay un espíritu converso que me cuenta historias que engullo sin mesura.

Las balsas que han aguardado mi llegada, no pasan de ser pequeñas hogueras inquisidoras que buscan a mis palabras. ¿Cuantas veces escapé de los tentáculos que mi tristeza ha extendido simulando caminos?

Ese ruido de fondo que me dicta que estoy vivo, ha logrado opacar cualquier grito desgarrador que pueda romper la hipnosis. Sin embargo... las noches de luces brillantes resucitan en mi mente preguntas sepultadas bajo lugares comunes, que a veces creo propios.

A veces, pesco rostros conocidos de entre las multitudes, sólo por el primario deseo de ver a través de sus ojos. Y cuando una nube apaga luna, el tacto me juega una mala pasada con las palabras perdidas que habitan las calles.

Por eso, mis dedos se desquitan contando leyendas que ni las estelas del camino pueden adivinar.

7 Comments:

Blogger Leodegundia said...

"Por eso, mis dedos se desquitan contando leyendas que ni las estelas del camino pueden adivinar."
Así es, eres un gran narrador y yo disfruto leyendo.
Un abrazo

1:31 a. m.  
Blogger juny said...

desde ahora te llamaré "Ingeniero con especialidad en Poesía"

5:21 p. m.  
Blogger stel said...

escapar de los tentáculos de la tristeza y poder contarlo es de valientes, porque no es nada fácil!
un gran texto, de verdad

4:55 a. m.  
Blogger Gema said...

Muy tierno Raúl,
otra poesía de las tuyas que llegan adentro...
Besos

8:00 a. m.  
Blogger Gema said...

Buenas Carcasone, qué tal va ya tu lesión, mejorcillo? Espermeos que sí. Tienes un montón de material, una gran aficción que has hecho tuya.
besos

8:07 a. m.  
Blogger Gema said...

Perdona, Raúl, la segunda vez que me pasa mi despiste, mil ventanas abiertas que no cierro y meto la pata metiendo comentarios en la ventana que lo he hehco, mil disculpas...

8:09 a. m.  
Blogger Eduardo Waghorn said...

Hermoso poema, talentoso amigo Colombiano.
Un saludo desde mi temporal desánimo...
Ya pasará, espero.

2:17 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home