miércoles, agosto 09, 2006

Cien

Algunos comentarios sobre la agradable experiencia de escribir en un blog, y la alegría de recibir comentarios de gente maravillosa

Después de algo más de tres meses me encuentro en el blog número cien, y no puedo evitar referirme al asunto (tal vez por la manía de ponerle números a todo, que nuestro gran maestro "El Principito" denunció con valentía).

La verdad es que nunca creí que fuera a llegar tan lejos con esto. Confieso que hace unos meses ni siquiera entendía muy bien que era un blog, ni las infinitas posibilidades que le puede llegar a brindar a un individuo. Fue a través de la revista Semana (editada aquí en Colombia) que me enteré de algunos detalles de este mundo de los "post" y de los comentarios.

Celebrar los momentos especiales es muy positivo, pues hace fijar nuestra atención en lo que realmente disfrutamos. Para mí, este blog ha sido una oportunidad muy grande de interactuar con gente, que de otra manera no "conocería". Además se ha convertido en un buen camino para dejar fluir mi pensamiento y mis sentimientos de manera libre. Para atreverme a hacer y planteas cosas diferentes.

Como ya les he comentado, estoy iniciando mis estudios de periodista, los cuales por una año alternaré con mi trabajo de vendedor de equipos de telecomunicaciones. Esto me parece un reto grande, y admito que a ratos me asusta, pero los sueños son una razón para luchar. Este blog me ayudó mucho a ingresar a la universidad. He mejorado mucho la ortografía (se que soy muy despistado al respecto, razón por la cual no ceso de pedir disculpas a mis amigos "blogers"). Mi redacción ha progresado mucho. Y lo más importante: Cada vez logro con mayor facilidad, poner al idioma a hablar de mis sensaciones, sueños e ideas. Cada día me apropio más de la valiosa herramienta de la escritura. Todo esto, gracias a los ánimos y comentarios sinceros y continuos de los "ciber-amigos".

Mi deseo es seguir escribiendo mucho. Cada vez con mejor calidad en todos los aspectos. Sin perder ni un poco de rebeldía, pero ganando un poco en rigor y técnica. Y eso si, aprendiendo continuamente de los blogs que frecuento.

De estos cien blogs quedan muchas cosas que contar: Un primer comentario duro, pero sincero, que me dejó pensando si valía la pena escribir. Los comentarios amables de Angelita e Ivich, que me llevaron a no desistir de este bonito experimento. Los comentarios de Jogom, siempre tan políticamente retadores, siempre capaces de poner a pensar hasta a una roca. Leodegundia, con sus frecuentes visitas, con su capacidad para valorar el trabajo de los demás, con su cultura impresionante (con su generosidad de no dejar sin comentario ninguno de mis posts). Leumas, y su bellísimo blog, el más hermoso que haya visitado nunca. El más transparente. ¿Como no querer enamorarse como él y su novia? Y claro, como olvidar a Brisaenlanoche, y su espectacular cuestionario idiomático, que puso a trabajar la creatividad de más de uno...

¿Y como no hablar de Mensajera28, y de sus comentarios, y de sus propuestas entre hermosas y sensuales, que me hacen sonrojar y sonreír; y sentir el calor de la Ciudad de Cali (donde vive) en mis venas?

La idea inicial era establecer nuevos nexos. ¿Como no sentirse motivado con el generoso comentario de Carlos, frente a mi poema11? Pero también fortalecer los viejos: ¿Como no disfrutar de conocer en su faceta electrónica, a mis buenos y viejos amigos: Guido, Jorge, Juan Manuel, Darío y Eduardo, quienes ocasionalmente se han deslizado por mi blog? (Lo cual valoro muchísimo, más aún en el caso de los médicos, quienes siempre están perdidos en los lugares más inhóspitos y desconectados de la tierra)

Además de agradecer a todos, quiero comentar algunos secretos sobre mi novata vida en los blogs:
-Al principio me sentí triste por la falta de comentarios, pero estos fueron llegando de poco en poco...
-Apenas encuentro un comentario, corro a leer la bitácora de la persona que me ha escrito. Es que me parece tan magnífico conocer un nuevo mundo.
-Una vez, leí un comentario muy positivo, pero cuando me dirigí a la página del autor me encontré unas fotos muuuy fuertes, que fui incapaz de comentar, como suelo hacer...
-Le pedí a todos mis viejos amigos que comentaran mi bitácora (para sentirme apoyado). Solo Jorge y Juan Manuel estuvieron comentando desde el inicio. Luego, llegarían los ciber-amigos, que harían que no extrañara más en este sitio a mis "viejos amigos" que no atendieron la invitación.
-Me sorprende ver todos los medios que nos ofrece la tecnología para hacer amigos. Hoy además de los viejos amigos, y los amigos de Bogotá, aprecio de corazón a mis amigos del messenger, y a mis amigos del blog.

En fin. Ha sido toda una experiencia esto del blog. Me he divertido mucho y confío en seguirme divirtiendo compartiendo con mucha gente.

En últimas, lo que más disfruto en la vida es interactuar con la gente, y conocer muchos estilos de vida. Y sorprenderme con lo similares que somos los seres humanos más allá de la distancia. Y con el blog, se puede hacer eso y mucho más.

¡Gracias!